Pagar menos impuestos desde tiempos inmemorables es lo que buscan todos los empresarios, en las pequeñas y medianas empresas esto es crucial para obtener una ventaja competitiva.

Hoy se convirtió en realidad: la Dirección General Impositiva (DGI) estableció que las pymes comprendidas en el Literal E pueden optar por pagar un porcentaje de sus ventas en lugar de una cuota fija si ingresan al régimen de facturación electrónica.

Con este cálculo, el valor a pagar siempre será menor a la cuota fija que pagaban hasta ahora especialmente al considerar los pagos durante el año.

En concreto,  son aquellas  empresas con ingresos menores a 305.000 UI al año (equivalente a unos $ 1.459.425 o $ 120.000 mensuales aproximadamente). Hasta ahora, el régimen de IVA Mínimo establecía únicamente el pago de un monto fijo mensual de $ 4.380.

Con el nuevo beneficio fiscal que ofrece la DGI, se puede optar por abonar el 3,3% de las ventas del mes, reduciendo su aporte en gran medida. No obstante, vale recalcar que este aplica, siempre y cuando, la empresa ingrese a la facturación electrónica.

Las empresas que documenten sus operaciones exclusivamente mediante CFE podrán optar por pagar la alícuota de IVA ($ 4.380 a valores vigentes 2021) o el 3,3% de sus ventas del mes¹   – Decreto 351/020

DGI desde hace años que lleva adelante un plan para que se vayan sumando de forma paulatina y su meta es incluir a todos los contribuyentes en el régimen de la e-factura. Por tal motivo, incentiva con diferentes acciones su incorporación.

Este es un beneficio ENORME. Si por ejemplo, la empresa factura $ 100.000 en el mes, paga $ 3.300. En caso de ser $ 50.000, aportaría $ 1.650. Si ocurre un extremo, de no tener ventas por tratarse de un negocio zafral, por pandemia o algún otro motivo, abona 0. Es algo que realmente no se dio nunca en la historia y hoy es posible gracias a la facturación electrónica.

Otro de los beneficios es que el tope es la cuota inicial. “Si se trata de un negocio zafral como pasa en muchas empresas y para Navidad factura $ 300.000, ese mes no pagará el 3,3% ($ 9.900) sino $ 4.380. Entonces, realmente el ahorro es cuantioso y real.

Otro de los problemas que también se enfrentaban los contribuyentes del Literal E, es que sus facturas no permitían descuento de impuesto a quienes las recibían.

Hoy con el nuevo sistema es posible ya que cualquier empresa que contrate servicios o productos a un Literal E puede deducir la misma de sus pagos impositivos.

Por eso en Digest Software tenemos una solución excelente para ayudar a todo ese grupo de empresas comprendidas en Literal E ofreciendo todos los trámites para el acceso inmediato a facturación electrónica y un software para aprovechar al máximo todos los beneficios que otorga DGI.

Que estas esperando ingresa ya al nuevo régimen y comienza a pagar menos impuestos y obtener grandes beneficios para tu Empresa.